Ajos secos ecológicos

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CompararAjos Secos Ecológicos online. Los ajos son una hortaliza originaria del centro y del sur de Asia. Su cultivo y consumo se remonta a 3.000 años a.C., en la India y Egipto. Su característico aroma y sabor se debe a su contenido en sustancias azufradas.
El aporte energético del ajo es mayor al de otras hortalizas debido a su elevado contenido en proteínas e hidratos de carbono. No obstante, esto no debe alarmarnos porque las cantidades que se suelen tomar de ajo son inferiores que las de las otras hortalizas. Además, el ajo es rico en minerales, como el potasio o el magnesio, y en vitamina B y C.
El consumo de ajos aporta muchos beneficios a nuestra salud. Por ejemplo, el ajo crudo tiene propiedades antisépticas y depurativas y ayuda a combatir bastantes hongos y virus. También contribuye a mejorar la salud cardiovascular, ya que favorece la vasodilatación, lo que disminuye la tensión arterial porque la sangre fluye con más facilidad. Por otro lado, reduce el riesgo de sufrir algunos tipos de cáncer.
Son tantas las propiedades medicinales que se le atribuyen el ajo deshidratado que resulta difícil hacer un resumen y separar lo real de lo supuesto o mantenido históricamente. Está demostrado que altas dosis de ajo disminuyen la presión sanguínea, estimulan la secreción de jugos intestinales y eliminan la flora intestinal perjudicial. Por otro lado, fortalece el sistema inmunológico, ayudando a prevenir y reducir los síntomas de enfermedades comunes como la gripe o el resfriado.
Los antioxidantes del ajo ejercen un efecto protector contra el daño celular y el envejecimiento natural. Lo que se asocia con una disminución en el riesgo de padecer enfermedades como la demencia o el Alzheimer. También se ha demostrado que el consumo de ajo reduce el nivel de colesterol malo (LDL), aunque parece no afectar sobre el colesterol bueno (HDL) y los triglicéridos.
En la antigüedad, este alimento se utilizaba para reducir la fatiga de los trabajadores y para aumentar la capacidad de los atletas. Hoy día se entiende que esto puede ocurrir en personas enfermas, aunque no ocurre en personas sanas.
El origen del ajo se centra en Asia central aunque tuvo una rápida difusión básicamente por la gran adaptabilidad del cultivo llegando a India y más tarde a Grecia a través del mediterráneo. Ya en esa época se utilizaba con fines medicinales. Se encuentra información en papiros que en el antiguo Egipto formaba parte de su medicina y era utilizado para alejar los malos espíritus. De esta forma, nos es raro encontrar restos de cabezas de ajo en tumbas de aquellos egipcios. Para ellos, el ajo era la conexión entre el hombre y el universo simbolizando los dientes del ajo el sistema solar.
En cambio, en Grecia el ajo era utilizado para la preparación de sus atletas que masticaban ajo antes de cada competición. Fue el imperio Romano el que popularizó e introdujo en su cocina este producto. El principal objetivo era que los soldados romanos tuvieran una dieta más energética y antiséptica.
El ajo deshidratado en la cocina
Tiene infinidad de usos como condimento de carnes, pescados, verduras, ensaladas, sopas y salsas. En guisos es preferible utilizar los dientes enteros y separarlos antes de servir, como en los estofados. Preparar salsa alioli para patatas cocidas, asadas o cualquier otro formato es también ideal. Congenia con todas las hierbas de cocina y con las especias, una pequeña cantidad de ajo deshidratado refuerza los demás sabores.